La era de la amnesia
Hipólito PS. / rotativoenlinea.com
Esdras Camacho / fotografía / rotativoenlinea.com
El frío de enero silba melodías
Con su lenguaje que dicta y narra;
Que cuenta y acoge, y da, y no pide.
Hace frío, y en el vasto lenguaje de las enredaderas
De los verdes prados y de las veredas
Aún no puedo hallar cobijo.
¿Es posible que no sepa buscar?
Hace frío, y el año nuevo tirita un lenguaje infinito
Cuyos significados corren y ríen entre las gotas del sereno del alba
En las faldas de las peñas donde manantiales límpidos susurran a la vida, porque son vida.
¿Es posible que no sepa escuchar? Seguramente, me justifico en mi monólogo, ellos no saben decir nada…
Pero ¿cómo entender ese lenguaje que no tiene palabras,
Que es imperfecto porque no avisa cuándo llega y cuándo se va, si está o se fue?
Seguramente, digo con miedo y angustia,
Mi derredor no sabe decirme
¿O yo no sé discernir? ¿Cómo es posible si soy era, soy evolución, soy pináculo?
¡Ay! Mis oídos no saben escuchar más que ignominiosos sonidos.
Mis labios no saben decir más que simples palabras que sólo saben acusar y dictar sentencias.
Y mis ojos, que no saben ver más allá del firmamento de los atardeceres de cuyas sonrisas brotan oro y zafiros, azucenas y margaritas.
Hace frío, enero es gélido,
Y ni siquiera el calor de todos las voces que quieren girar la rueda del tiempo a su favor,
Pueden calentar los viejos (y disque nuevos) tiempos
Hace frío, bajo este Manto Blanco
Que arropa el lomo de los gigantes
Que antes de sumergirse en su sueño milenario
Dictaron, con un lenguaje desconocido, las leyes que gotean con la lluvia,
Que crecen junto a las siembras,
Que son raíz y abono,
Esperanza después del sudor,
Alivio después de la confusión.
¡Pero yo! Un pobre huérfano entre está a tierras;
Un sordo,
Un mudo,
Un ciego,
Que oyendo;
Y hablando,
Y viendo;
No puedo oír,
Ni decir,
Ni ver
Los lamentos y las voces
Del lenguaje de los olvidados, de los condenados
Que murieron para que no murieran:
Sus oídos,
Sus mensajes que no son palabras,
Y sus miradas que son el ayer y nuestro mañana.