Jueves, 26 de junio de 2025

El escándalo de Igor Stravinsky

El fin del arte es expresar a través de la creatividad, no como una innovación sino el uso de la memoria.


Por rotativoenlinea.com

5 de julio de 2021 Actualizado a las 23:07:23

Naúm Roblero / rotativoenlinea.com

La música alcanzó una cúspide inalcanzable con músicos como J. S. Bach, Mozart, Vivaldi por mencionar algunos, la lista es interminable. Ellos propusieron una música llena de una melodía “agradable”. Por ejemplo Camille Saints Saens, coetáneo de Stravinsky, realizó una cadencia rítmica. Lo menciono porque es todo lo contrario a Stravinsky y por cierto, se enfureció en el estreno de La consagración de  la primavera.

La música lejos de ser  arbitraria, estos compositores clásicos sentaron las bases de este arte. Alcanzaron  una cima de creatividad en esta área artística. Ya había las bases para continuar un camino. Ya mencionado con anterioridad, fue el  músico esencial llamado Igor Stravinsky. Se hace notar con “El pájaro de fuego” donde al final de la pieza musical encuentra una nueva forma de expresarse y una forma de experimentar. En la obra “La consagración  de la primavera” el músico ruso abrió  nuevas posibilidades y descubrió  una nueva forma de hacer música.

La consagración de la primavera empieza con una melodía, con una armonía inigualable. Conforme avanza la pieza musical comienzan a escucharse ruidos extraños, bizarros, algo que no se había escuchado ni hecho con anterioridad. La novedad del músico ruso fue la introducción de percusiones y una disonancia en una orquesta. Una serie  de instrumentos y  de percusiones manejando tiempos.

Cuenta la historia que cuando La consagración de la primavera fue estrenado en el teatro de Francia todos estaban enojados ante semejante música llena de disonancias: sonidos que salían de un allegro y pasan en un adagio.

Algunas veces se aceleran  esos sonidos. Con la  inclusión ya de las percusiones es una nueva forma de hacer música. El estreno de esta obra en Francia causó un escándalo de todas las emociones y precisamente fue  la intención del autor: no causar una novedad de emociones, sino de contrastar el arte de su tiempo.  El estreno en Francia causó desprecio,  enojo y hasta burla. Claro Stravinsky no esperaba recibir el rechazo sino por lo menos una crítica menos emocional sino una más razonada. Con el paso del tiempo La consagración de la primavera ya no causa la misma emoción de encono sino que es escuchada como una obra de música clásica porque eso es.

El fin del arte es expresar a través de la creatividad,  no como una innovación sino el uso de la memoria.

El músico ruso siguió con la tradición clásica. Quien pensaría que la música pudiera llegar a degenerarse tanto como en la actualidad.  

Si bien es cierto que la música forma parte de la expresión de un conglomerado humano también debe de tener parámetros para hacerlo medible y critico.

Pues si no existe parámetros medibles del arte éste llegaría a ser una actividad meramente comercial y no porque no pueda serlo sino que sea el único de valor. La  música continúa su camino hacia la tecnología como otras de tantas actividades como las relaciones humanas, la educación, entretenimiento y nos cuestionan como sociedad entre lo real y lo ficticio. Pues la ilusión es depresiva.

Sin duda, escuchar música ahora es accesible desde el internet y con ello, también la multitud de expresiones musicales se amplía. ¿Cuál es la finalidad de la música? Sino es la de recrear el espíritu humano y  estamos ante una actividad comercial.

El escándalo que provocó Igor Stravinsky fue la de un artista esencial. Ahora escuchamos la consagración de la  primavera y sabemos que estamos ante una obra maestra. Es como si la primavera se desplazara por el bosque y cerrando los ojos, entra la noche primitiva y es la inauguración  de la estación más entrañable.